1. Corazon autentico
Un corazón repleto de tradición y de pasión: el empeño de Caglificio Clerici para conseguir la excelencia. Una tradición que trae consigo el valor del saber elaborar el cuajo desde 1872 de forma tradicional y auténtica, como se hacía antaño. La pasión y el gusto genuino de las cosas simples y artesanales, nuestra pasión por el trabajo y ganas de crecer más y más. Tradición y pasión que pretendemos mantener en nuestro mismísimo corazón, principalmente porque amamos lo que hacemos y producimos.
2. La pureza de los abomasos
2) Los abomasos que escogemos para nuestra producción de cuajo son los mejores de todo el mundo. Con el paso de los años hemos logrado entender cuáles son las sofisticadas características de los estómagos para extraer las mejores enzimas. Nuestros proveedores son los de siempre, conocidos en todo el mundo y que, además, se han convertido en nuestros socios consolidados. La genuinidad de los terneros, lo más jóvenes posibles y nutridos solo con el calostro de la madre, es nuestra marca personal que destaca de entre los demás cuajos disponibles en el mercado: la elección de los terneros es el elemento crucial que crea el perfil organoléptico de la calidad Clerici.
3. Una extraccion primorosa
La naturaleza ya nos regala las mejores enzimas para coagular la leche.
Una extracción primorosa, delicada y cuidadosa es el punto clave. Las enzimas, cuanto menos estrés sufran, más actividad y calidad de acción en la caldera mostrarán. Nuestra extracción se lleva a cabo con ritmos muy lentos para respetar el valioso contenido enzimático y el carácter natural del producto. Nuestro método de extracción forma parte de una tradición e historia que solo a nosotros pertenece y que, además, se está utilizando desde finales del año 1800. Una tradición e historia que no ha hecho más que mejorar solo gracias a la experiencia de nuestra empresa, heredada generación tras generación.
4. Las manos expertas
Nuestras manos expertas forman parte de cada fase crítica del proceso de producción. La sensibilidad y la sabiduría del personal de Clerici es la clave fundamental que nos permite diferenciarnos. El personal trabaja con nosotros desde hace muchos años y, gracias a su experiencia y rigurosidad, es capaz de interpretar de la mejor manera los momentos clave de la elaboración de cada proceso de producción y los momentos exactos para intervenir a través de la tecnología. La sensibilidad de nuestros colaboradores es un arte, una tradición, un valor italiano. Conocemos perfectamente el historial completo de cada uno de los kg de cuajo, transformándolo desde su forma bruta hasta un producto único que recoge el más alto nivel de pureza.
5. Un laboratorio minucioso
Nuestro laboratorio posee una experiencia tan exhaustiva y puntual que se convertido en el laboratorio de control y de referencia para varios de nuestros competidores. Nuestro proceso de control de calidad ha sido diseñado para garantizar un análisis detallado en cada fase crucial de la producción y para lograr los máximos niveles en cuanto a fiabilidad, higiene y seguridad. Una dedicación constante para ofrecer productos óptimos y 100% seguros. La adopción de procedimientos modernos garantiza el mantenimiento de la genuinidad, salubridad e higiene del cuajo, desde su extracción hasta la mesa. Una garantía que nace del gran interés por el bienestar de los consumidores.
6. Los antiguos hornos de secado
Si hay algo de lo que podemos presumir, eso son nuestros hornos de secado: hornos tradicionales como los de antaño. La fase de desecación es una fase muy delicada de nuestro proceso productivo ya que estabilizamos las enzimas de forma que mantengan su mejor rendimiento solo y directamente en la caldera. De hecho, el cuajo es un producto vivo porque deriva de la naturaleza, que luego, con la maduración del queso, transforma las enzimas del cuajo en esas sensaciones que esperamos encontrar en un buen queso… casa, amor, pasión, aroma y sabor.
7. El equipo profesional
Queremos a nuestros clientes, creemos que cada uno de ellos es especial e intentamos ayudarlos buscando soluciones positivas para obtener una mejora recíproca. La celeridad es nuestro valor intrínseco: intentamos responder a los clientes con la mayor brevedad posible para garantizarles la máxima satisfacción en términos de eficiencia y proporcionarles soluciones que cumplan con los máximos estándares de calidad.